¿Cómo los Bebes Desarrollan Gordura?

Obesidad Infantil

Historia en Breve -

  • Según las últimas estadísticas, el 17 por ciento de los varones británicos y el 16 por ciento de las niñas ahora son parte de la categoría de obesos. En los Estados Unidos el 18 por ciento de los niños estadounidenses entre las edades de seis y 11 años son obesos
  • En los Estados Unidos, las personas más pobres tienen las tasas más altas de obesidad, una indicación de que el problema se deriva de sus elecciones alimentarias. Algo incluido en los alimentos más baratos y más fácilmente disponible está causando estragos metabólicos
  • La fructosa refinada, típicamente en alguna forma de jarabe de maíz, ahora se encuentra prácticamente en todos los alimentos procesados y en la comida rápida, y la fructosa en realidad "hace" que su cuerpo consuma más calorías y que almacene grasa
  • Los granos son otro culpable, ya que se convierten rápidamente en azúcar en el cuerpo de su hijo. Estos tipos de carbohidratos (fructosa y granos) afectan a las hormonas insulina y leptina, las cuales son reguladoras muy potentes de grasa
  • La forma más sencilla para revertir esa epidemia, tanto en niños como en adultos, es enfocarse en alimentos enteros de preferencia orgánicos - alimentos que no han sido procesados o alterados de su estado original

Por el Dr. Mercola

El documental de British BBC originalmente se transmitió en 2008. En ese momento, uno de cada cuatro niños de edad preescolar en el Reino Unido tenía sobrepeso u obesidad, lo que se relaciona con la misma tasa de obesidad infantil en los Estados Unidos.

Según las últimas estadísticas,1 30 por ciento de los niños británicos de entre dos y 15 años tienen sobrepeso o son obesos.

De la misma manera, en los Estados Unidos, más de un tercio de los niños y adolescentes tienen sobrepeso o son obesos. Dieciocho por ciento de los niños estadounidenses entre las edades de seis y 11 entran en la categoría de obesos—más del siete por ciento que era en 1980.2 El cinco por ciento de los niños estadounidenses tienen "obesidad severa", lo que los pone en grave riesgo de enfermedades crónicas que anteriormente eran típicas en los adultos, tal como la enfermedad cardiaca y la enfermedad del hígado.

Un hecho interesante es que, a diferencia de los países del tercer mundo, en los Estados Unidos los más pobres tienen los mayores índices de obesidad.

Esta aparente contradicción, considero yo, es una clara indicación de que el problema se deriva de la misma alimentación. Algo incluido en los alimentos más baratos y más fácilmente disponible está causando estragos metabólicos.

En resumen, la epidemia de la obesidad es una consecuencia directa de una alimentación a base de alimentos procesados ​​con rellenos baratos no nutritivos, ingredientes artificiales, y aditivos químicos sintéticos (muchos de los cuales están prohibidos en otros países debido a sus efectos en la salud).

Lo más importante es que casi todos los alimentos procesados ​​están llenos de fructosa refinada, principalmente en forma de jarabe de maíz alto en fructosa, y para colmo la mayoría de los alimentos en los Estados Unidos son transgénicos o genéticamente modificados. Este tipo de alimentación es un factor importante en la receta para la obesidad.

La Obesidad es el Resultado Inevitable de una Dieta de Alimentos Procesados

Muchos padres, incluyendo los que aparecen en este documental, están confundidos acerca de la causa del exceso de peso de sus hijos. La raíz del problema se hace rápidamente reconocible cuando empiezan a observar los alimentos que consume el niño y eso incluye alimentos para bebés.

Si usted alimenta a su hijo con leche comercial para niños, alimentos para bebés y/o jugos de diversas frutas, es necesario que tenga en cuenta que le está proporcionando a su hijo una enorme cantidad de azúcar, varias veces al día.

De hecho, algunos alimentos para bebé contienen la misma cantidad de azúcar y grasas saturadas que las galletas de chocolate o las hamburguesas con queso. En una encuesta realizada en 2009 en más de 100 alimentos para bebés y niños pequeños se encontraron productos que contenían 29 por ciento de azúcar, y otros que contenían grasas trans, que se han relacionado con enfermedades del corazón.

Cuando la alimentación de un niño comienza con una alimentación de fructosa procesada ​​y grasas trans, el exceso de peso no es un resultado misterioso, simplemente es inevitable.

Los padres tienen que abrir los ojos y enfrentar la realidad de que los alimentos procesados ​​han cambiado dramáticamente en los últimos años. El nivel de procesamiento y aditivos químicos ha aumentado de manera exponencial y la mayoría de los alimentos hoy en día están disponibles en cajas o latas.

Los alimentos convenientes pre-empacados ​​de hoy en día han sido procesados ​​y alterados hasta el punto de ser casi irreconocibles en términos nutritivos en comparación con los alimentos reales.

El documental destaca a Paul Gately, Profesor de Ejercicio y Obesidad en la Universidad Metropolitana Leeds, quien organizó el primer campamento para la pérdida de peso en Gran Bretaña enfocado en niños menores de cinco años. Como dice Gately, es importante mantener bajo control el peso de su hijo lo antes posible, ya que la obesidad aumenta dramáticamente su riesgo de una amplia variedad de enfermedades crónicas, tales como:

Diabetes, que puede dar lugar a toda una serie de otros problemas médicos

Insuficiencia cardíaca congestiva, una condición en la cual el corazón no puede bombear suficiente sangre a otros órganos de su cuerpo

Embolia pulmonar, un bloqueo potencialmente mortal de una arteria

Enfermedad del hígado graso, en el que las grandes bolsas de grasa se acumulan en las células del hígad

o

Osteoartritis

Enfermedad de gota, causada por la acumulación de ácido úrico en la sangre

Enfermedad de la vesícula biliar, resultante de altos niveles de colesterol en la sangre, lo que puede causar piedras en la vesícula

Cáncer, especialmente cánceres sensibles al estrógeno, como el cáncer de mama

¿Está Alimentando a su Hijo con Azúcar Durante Todo el Día?

Estoy en desacuerdo con la idea de que los niños pequeños simplemente están consumiendo demasiadas calorías y no hacen suficiente ejercicio físico. Los niños pequeños han comido energéticamente por muchos siglos sin estar obesos y enfermos. Una vez más, el problema medular está en la fuente de esas calorías.

Si usted desea darle a su bebé un buen comienzo nutricional, no siga los consejos que le proporcionan la mayoría de los libros para bebés que lo animan a alimentar a su bebé con cereales de arroz-- un carbohidrato refinado. Además de acuerdo con el pediatra Alan Greene de la Universidad de Stanford, el arroz a diferencia de la leche materna o la fórmula, es la principal fuente de calorías en los niños en el primer año de vida, y esto es nada menos que un desastre nutricional.

Para muchos niños, es un declive. La fructosa refinada, típicamente en alguna forma de jarabe de maíz, ahora se encuentra prácticamente en todos los alimentos procesados ​​y comida rápida que pueda imaginar, y la fructosa en realidad “hace” que su cuerpo consuma más calorías y que almacene grasa.

Los granos son otro culpable, ya que se convierten rápidamente en azúcar y grasa en el cuerpo de su hijo. Estos tipos de carbohidratos (fructosa y granos) afectan a las hormonas insulina y leptina, las cuales son reguladoras muy potentes de grasa. (Las grasas y las proteínas afectan en un grado mucho menor.) Así que por favor no se deje engañar por la idea errónea de que los cereales son un alimento ideal para el desayuno.

Hace dos años, Kellogg tuvo el descaro al afirmar, en su sitio web, que "el azúcar no causa diabetes tipo 2, obesidad, enfermedades del corazón o hiperactividad.3 En ese momento, comente que deberían ser multados por publicidad fraudulenta. Desde entonces, han eliminado esa loca declaración, y ahora sólo lo invitan a que “considere bien antes de consumir azúcar#, señalando que:4

"El azúcar en los cereales - incluyendo cereales para niños - aporta menos del 5 por ciento del consumo diario de azúcar. Sin embargo, añade sabor, textura y placer a los cereales, así como también fomenta el consumo de fibra, vitaminas y minerales - nutrientes esenciales que usted y sus hijos no pueden obtener a través de otros tipos de alimentos."

Su afirmación sigue siendo ridícula, ya que los nutrientes que su hijo necesita realmente se encuentran en alimentos frescos y enteros, no en una caja de cereales procesados ​​cargados de azúcar y aditivos químicos sintéticos, pero por lo menos no es descaradamente fraudulento como muchas otras mentiras y engaños de la industria alimentaria.

Muchos Niños Están Hipnotizados con las Sodas y Bebidas de Frutas Azucaradas

Muchos niños también toman soda todos los días. Muchos de ellos también toman jugo de frutas, algunos de ellos contienen poco, o nada de jugo de fruta real y cientos de gramos de azúcar en un litro. Los padres a menudo creen que las bebidas de frutas son saludables para sus hijos, y eso es precisamente lo que los fabricantes quieren que crean.

Como se informó recientemente en el Guardian Express,5 los niños de hoy en día son 40 por ciento más pesados en comparación con los niños de hace 25 años, y un número creciente de estudios han relacionado el aumento de las tasas de obesidad infantil con un mayor consumo de bebidas azucaradas (incluyendo los endulzados azucares bajos o con cero calorías.)

Como regla general, la industria de bebidas ha negado o minimizado con firmeza su papel en la epidemia de la obesidad infantil, a pesar del hecho de que las empresas de bebidas gastan más de $ 1 millón al año en mercadotecnia enfocada en la juventud, especialmente en las escuelas.

Según The Guardian Express, el 80 por ciento de las escuelas estadounidenses tienen contratos con Coca-Cola o Pepsi para abastecerse sus productos en las máquinas expendedoras de las escuelas. Es una situación insostenible, de verdad. Está claro que funciona el marketing, o de lo contrario no lo estarían haciendo, y cuando los anuncios están dirigidos a un público de 2 - a 17 años de edad, es casi un accidente que los niños de esa edad opten por soda cuando se les da una elección.

Los Niños También Están en Mayor Riesgo de Efectos Secundarios de los Transgénicos

En los Estados Unidos, los padres también tienen que lidiar con el hecho de que una gran mayoría de la fructosa a base de maíz es transgénica o modifica genéticamente y está infectado con el herbicida tóxico glifosato, que es el ingrediente activo de Roundup de Monsanto. Expertos como el Dr. Don Huber creen firmemente que el glifosato es en realidad más tóxico que el DDT.

Pruebas convincentes ahora sugieren que los residuos de glifosato encontrados en los alimentos más consumidos en la dieta occidental son cortesía del azúcar, maíz, soya y trigo modificados genéticamente, mejoran los efectos perjudiciales de otros residuos químicos derivados de los alimentos y las toxinas del medio ambiente con el fin de interrumpir las funciones normales del cuerpo e inducir la enfermedad. El glifosato también perturba gravemente la flora intestinal, lo que incluso genera más problemas metabólicos y mala salud.

Otros organismos transgénicos, también se pueden encontrar en las fórmulas para bebes y nadie sabe realmente lo que pueden ocasionar a la salud estos ingredientes, sobre todo a largo plazo. Es importante recordar que libra por libra, los niños experimentarán una mayor exposición a las sustancias químicas que los adultos, y su barrera hematoencefálica es inmadura y porosa, lo cual permite una mayor exposición a sustancias químicas que llegan a su cerebro en desarrollo. Por lo tanto una alimentación con productos orgánicos es realmente crucial para los bebés y niños pequeños.

La Lactancia Materna es el Comienzo Saludable que Necesita su Bebé

La lactancia materna es sin duda la mejor opción. Además de no contar con todo el arsenal de nutrientes esenciales obtenidos de la leche materna, muchas fórmulas infantiles también contienen demasiada azúcar (el bebé no la necesita). Pero no sólo es una cuestión de vitaminas, minerales, proteínas y grasas que hace que la leche materna sea muy superior a la fórmula. La leche materna también contiene sustancias que pueden mejorar significativamente el intestino de su bebé y apoyar el sano desarrollo de todo su sistema nervioso.

Si usted no puede amamantar a su bebe, sería recomendable considerar comprar leche materna, que se está convirtiendo en un excelente producto en línea. Las mujeres lactantes están vendiendo su leche extra para otras familias, muchas de ellas se están asociando con Craigslist y otros sitios clasificados. Esta tendencia se remonta a tiempos antiguos, cuando se utilizan nodrizas (mujeres que amamantan a otros bebés además de los suyos).

Por favor evite alimentar a su bebé con formula a base de soya, ya que puede contener altas concentraciones peligrosas de manganeso y compuestos estrogénicos. Además de ingredientes transgénicos, también se ha descubierto que las fórmulas infantiles están contaminadas con una variedad de productos químicos problemáticos a largo de los años, incluyendo:

  • Percloratos (un componente del combustible para cohetes)
  • Melamina
  • Productos finales de glicoproteína avanzada (AGE)

Cómo Introducir Alimentos Sólidos

Fuera de la leche materna, los mejores alimentos que usted puede dar a su bebé son aquellos que prepara en casa para su familia. Los alimento que venden en las tiendas no se pueden comparar nutricionalmente, ya que contienen ingredientes poco saludables y con frecuencia su bebé estaría mucho mejor sin ellos.

Cuando su bebé está listo para comenzar a comer alimentos sólidos, introduzca alimentos diferentes de uno en uno por intervalos de dos a tres días. Esto ayuda a que su bebé se acostumbre a los alimentos, y también le ayudará a revelar cualquier sensibilidad o alergia a los alimentos. Pequeñas porciones, incluso una cucharada o dos, son lo mejor para empezar.

A medida que su bebé crece puede pasar de comer papilla de alimentos enteros a comer con los dedos, pero asegúrese de cortar los alimentos en porciones lo suficientemente pequeñas como para que no sean un peligro de asfixia. Las pasas, nueces, palomitas de maíz y otros alimentos pequeños no se deben dar a los niños pequeños debido al riesgo de asfixia.

La Alimentación Saludable de su Hijo Depende de Usted

Los niños simplemente no saben qué alimentos son saludables a menos que usted, como padre, se los enseñe. Recuerde, los alimentos saludables son "vivos" y alimentos normalmente crudos, y el sello de alimento vivo es el hecho de que se marchitan y se descomponen. El hecho de que la comida rápida, hamburguesas, panes, papas fritas no se descomponen, incluso después de una década, es una clara señal de que no solo es un alimento de verdad sino que además no tiene ningún valor nutricional en la alimentación de su hijo

Es muy simple: los niños necesitan alimentos reales, no productos químicos hechos por el hombre que son inexistentes en la comida natural. Estos sustitutos no son equivalentes a la oferta real.

La comida es una parte de un estilo de vida crucial que se aprende en casa, por lo que necesita educarse sobre nutrición adecuada y los peligros de la comida chatarra y los alimentos procesados ​​con el fin de cambiar la cultura de la alimentación de toda la familia. Para darle a su hijo el mejor comienzo en la vida, e inculcarle hábitos saludables que durarán toda la vida, debe predicar con el ejemplo. Si no está seguro por dónde empezar, le recomiendo leer primero mi plan de nutrición. Esto le proporcionará la base que necesita para empezar a hacer la elección de alimentos saludables para su familia.

La forma más sencilla para revertir esa epidemia, tanto en niños como en adultos, es centrarse en alimentos enteros de preferencia orgánicos - alimentos que no han sido procesados ​​o alterados de su estado original. Alimentos que han sido cultivados de acuerdo con la naturaleza, sin el uso de aditivos químicos, pesticidas y fertilizantes. Usted, un miembro de una familia o alguien más tienen que invertir tiempo en la cocina para cocinar alimentos frescos con el fin de liberarse de los alimentos procesados que al final le causaron estragos en su salud.

Al hacer esto, y comer juntos como una familia, sus hijos recibirán la nutrición adecuada que su cuerpo necesita durante los años de desarrollo importantes, mientras que también desarrollan amor por alimentos frescos el cual les durará toda la vida.