El Azúcar Puede Ser Malo, Pero Este Endulzante es Mucho Más Mortal

Por el Dr. Mercola

Los científicos han demostrado por primera vez que la fructosa, una forma barata de azúcar utilizado en miles de bebidas y productos alimenticios, puede dañar el metabolismo humano y se encuentra colaborando con la crisis de obesidad.

La fructosa, un endulzante que por lo general se deriva del maíz, puede causar que las células de grasa crezcan alrededor de órganos vitales poniéndolos en peligro y es capaz de desencadenar las primeras etapas de la diabetes y de enfermedades cardíacas.

Durante 10 semanas, 16 voluntarios se sometieron a una dieta controlada que incluía altos niveles de fructosa que produjo nuevas células de grasa alrededor de su corazón, hígado y otros órganos digestivos.  Ellos también mostraron signos de anormalidades  de procesamiento de alimentos relacionadas con la diabetes y enfermedades cardíacas.  Otro grupo de voluntarios que llevaban la misma dieta, pero remplazaron la fructosa con la glucosa, no presentó los mismos problemas.

Comentarios del Dr. Mercola

Este estudio se une a un creciente grupo de estudios científicos que demuestran que consumir jarabe de maíz de alta fructosa es la manera más rápida de dañar su salud. En la actualidad, se sabe sin duda alguna que el azúcar en sus alimentos, en todas sus formas, está cobrándole un precio muy caro a su salud.

Y la fructosa en cualquiera de sus formas- incluyendo el jarabe de maíz de alta fructosa (JMAF) y la fructosa cristalina- es lo peor de lo peor.

La fructosa es uno de los principales causantes de:

  • La resistencia a la insulina y la obesidad
  • La presión arterial alta
  • Los niveles elevados de triglicéridos y LDL
  • El agotamiento de vitaminas y minerales
  • Las enfermedades cardiovasculares, enfermedades del hígado, cáncer, artritis e incluso gota

Una Caloría No Es Una Caloría

La glucosa es la forma de energía para la que estamos diseñados. Cada célula de su cuerpo, cada bacteria- y de hecho, todo ser viviente sobre la Tierra- utiliza la glucosa como forma de energía.

Si usted recibe la fructosa únicamente en forma de frutas y vegetales (donde se origina de manera natural) como lo hacía la mayoría de las personas hace un siglo, usted consume cerca de 15 gramos al día- muy lejos de los 73 gramos por día que recibe el adolescente promedio de las bebidas endulzadas. En las frutas y vegetales, hay una mezcla con fibra, vitaminas, minerales, enzimas y fitonutrientes benéficos, que en conjunto moderan cualquier tipo de efecto metabólico negativo.

No es que la fructosa se mala por sí sola- son las DOSIS MASIVAS a las que usted está expuesto las que la hacen peligrosa.

Hay dos razones por las que la fructosa es tan dañina:

  1. Su cuerpo metaboliza la fructosa de una manera muy diferente a la que metaboliza la glucosa. Toda la carga de la fructosa metabolizada recae sobre el hígado.
  2. Las personas están consumiendo la fructosa en grandes cantidades, lo que ha hecho que los efectos negativos sean peores.

Hoy en día, el 55 por ciento de los endulzantes que se utilizan en la fabricación de alimentos y de bebidas están hechos de maíz y la fuente principal de calorías en los Estados Unidos es la soda, en forma de fructosa.

Los fabricantes de bebidas han comenzado a cambiar sus endulzantes, de sucralosa (azúcar de mesa) a jarabe de maíz, en 1970 descubrieron que el JMAF no sólo es lo más barato que se puede hacer sino que es 20% más dulce que el azúcar de mesa.

El JMAF es bien 42% o 55% fructosa y la sucralosa es 50% fructosa, por lo que es realmente algo limpio en términos de dulzura.

Sin embargo, este cambio ha alterado de manera drástica la dieta del estadounidense promedio. El occidental promedio consume la asombrosa cantidad de 142 libras de azúcar al año. Y los productos en que las personas confían para bajar de peso- los alimentos bajos en grasa- a menudo son los que más fructosa contienen.

Para empeorar las cosas, toda la fibra ha sido removida de estos alimentos procesados, por lo que en esencia no tienen ningún valor nutritivo.

Lo Básico Sobre el Metabolismo de la Fructosa

Sin adentrarnos en la compleja bioquímica del metabolismo de los carbohidratos, es importante entender algunas de las diferencias sobre cómo el cuerpo controla la glucosa en comparación con la fructosa. Publicaré un artículo sobre esto en los próximos meses, en el cual hablaré más a detalle sobre el tema, pero para nuestro propósito aquí, sólo resumiré los puntos principales.

El Dr. Robert Lustig,[i] profesor de pediatría en la División de Endocrinología de la Universidad de California, San Francisco, ha sido un pionero en la decodificación del metabolismo del azúcar. Su trabajo ha resaltado algunas de las principales diferencias en cómo se descompone y utilizan los diferentes azúcares:

  • Después de comer glucosa, el 100 por ciento de la carga metabólica recae en el hígado. Pero con la glucosa, su hígado solo descompone el 20 por ciento.
  • Cada célula del cuerpo, incluyendo su cerebro, utiliza glucosa. Por lo tanto, la mayor parte de ella se “quema” de manera inmediata después de consumirla. A diferencia de la fructosa, que se convierte en ácidos grasos (FFAs), VLDL (la forma dañina de colesterol) y triglicéridos, que se almacenan en forma de grasa.
  • Ácidos grasos se crean durante el metabolismo de la fructosa y se acumulan en forma de grasa en su hígado y tejidos musculares, causando resistencia a la insulina y enfermedad del hígado graso no alcohólica (NAFLD). La resistencia a la insulina se convierte en síndrome metabólico y diabetes tipo II.
  • La fructosa es el carbohidrato más lipofílico. En otras palabras, la fructosa se convierte en glicerol activo (g-3-p), que se utiliza directamente para convertir los FFAs en triglicéridos. Mientras más g-3-p tenga más grasa almacena. La glucosa no hace todo esto.
  • Cuando usted come 120 calorías de glucosa, menos de una caloría se almacena en forma de grasa. 120 calorías de fructosa, dan como resultado 40 calorías almacenadas en forma de grasa.  ¡Consumir fructuosa en esencia es consumir grasa!
  • La glucosa suprime la grelina, hormona del hambre, y estimula la leptina, que suprime el apetito. La fructosa no tienen ese efecto en la grelina e interfiere con la comunicación entre la leptina y su cerebro, lo que resulta en comer en exceso.

Si cualquier persona trata de decirle que el azúcar es azúcar, entonces están muy equivocados. Como puede ver, hay grandes diferencias entre cómo su cuerpo procesa cada tipo de azúcar.

La conclusión es: la fructosa conduce al aumento de grasa abdominal, resistencia a la insulina y síndrome metabólico- sin mencionar la larga lista de enfermedades crónicas que pueden ser causadas por ella.

Pánico en los Campos de Maíz

A medida que sale la verdad sobre el JMAF, la Asociación de Refinadores de Maíz está luchando por convencerlo que su producto es igual que el azúcar de mesa, que es “natural” y seguro.

Por supuesto, muchas cosas son “naturales”- la cocaína es natural, pero usted no querrá consumir 142 libras de cocaína al año.

La industria de alimentos y bebidas no quiere que usted se dé cuenta que tan presente esta realmente el JMAF en su alimentación- no sólo en forma de jugos y bebidas, sino en aderezos, condimentos y prácticamente todos los alimentos procesados. La introducción del JMAF a la alimentación occidental en 1975, ha sido un éxito comercial multimillonario para la industria del maíz.

La FDA clasifica la fructosa como GRAS: Generally Regarded As Safe (Generalmente Considerado como Seguro). Lo que prácticamente no significa nada y no se basa en nada.

Existe demasiada información que demuestra que la fructosa no es segura-pero los efectos en la salud de la nación no han sido inmediatos. Es por eso que apenas nos estamos dando cuenta de los efectos de desinformación nutricional de las ultimas tres décadas.

Como si los efectos metabólicos no fueran suficientes, hay otros problemas con la fructosa que desaprueban su seguridad:

  • Más de un estudio ha detectado niveles inseguros de mercurio en el JMAF [ii]
  • La fructosa cristalina (una forma de fructosa súper-potente que está utilizando la industria de alimentos y bebidas) podría contener arsénico, plomo, cloro y metales pesados.
  • Casi todo el jarabe de maíz de alta fructosa está hecho de maíz genéticamente modificado, lo que viene con sus propios riesgos.

La FDA no tocará el azúcar, así que depende de usted tomar el control de sus propios hábitos alimenticios.

¿Qué Debe Hacer un Adicto al Azúcar?

Idealmente, le recomiendo evitar tanto azúcar como le sea posible. Esto es especialmente importante si usted padece de diabetes o sobrepeso, colesterol alto o presión arterial alta.

También sé que no vivimos en un mundo perfecto y seguir las estrictas normas alimenticias a menudo no es práctico o incluso posible.

  1. Utilizar hierba stevia
  2. Utilizar azúcar orgánica con moderación
  3. Utilizar miel orgánica y crudo con moderación
  4. Evitar TODO tipo de endulzantes artificiales, que pueden dañar su salud incluso más rápido que la fructosa
  5. Evite el jarabe de agave, ya que es savia altamente procesada que está llena de fructosa. Su azúcar en la sangre se irá para arriba tal y como lo haría si estuviera consumiendo azúcar regular o JMAF. El meteórico ascenso de popularidad que ha tenido el agave es gracias a las campañas de publicidad, sin embargo, todos los beneficios que se encuentran en el agave naturalmente son eliminados.
  6. Evite las llamadas bebidas energéticas y deportivas porque están cargados de azúcar, sodio y aditivos químicos. Rehidratarse con agua purificada y fresca es su mejor opción.

¿Qué Más Dice la Ciencia Sobre el Impacto que Tiene la Fructosa en la Salud?

De acuerdo con GreenMedInfo.com, los estudios científicos han relacionado la fructosa con cerca de 30 enfermedades y problemas de salud diferentes. De clic en las ligas proporcionadas para revisar cómo la fructosa podría:

Elevar a presión arterial y causar hipertensión nocturna Resistencia a la insulina/ Diabetes tipo 2 Enfermedad del hígado no graso no alcohólica
Elevar los niveles de ácido úrico, que puede causar gota y síndrome metabólico Acelerar la progresión de la enfermedad renal crónica Aterosclerosis intracraneal(estrechamiento y endurecimiento de las arterias del cráneo)
Trastornos cardíacos si es deficiente de cobre Tener un efecto genotóxico en el colon Promover la metástasis en pacientes con cáncer de mama
Causar daño tubulointersticial  (lesión de los túbulos y tejido intersticial del riñón) Promueve la obesidad y problemas y enfermedades relacionadas Promueve el crecimiento del cáncer de páncreas
+ Fuentes y Referencias