Por el Dr. Mercola
En las últimas semanas, hemos aprendido las inquietantes verdades sobre el glifosato, el ingrediente activo en el herbicida Roundup de amplio espectro de Monsanto, que es rociado generosamente en los cultivos transgénicos o genéticamente modificados (GM).
Por lo general, los cultivos transgénicos están mucho más contaminados con glifosato que los cultivos convencionales, debido al hecho de que están diseñados para soportar niveles extremadamente altos de Roundup sin verse afectados como las malas hierbas.
Un nuevo informe escrito por Anthony Samsel, un consultor de ciencias jubilado y colaborador del Foro de Vital Votes en Mercola.com y la Dra. Stephanie Seneff, científico investigador del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), revela cómo el glifosato destruye la salud humana.
En la entrevista, la Dra. Seneff resume dos de los principales problemas causados por el glifosato en la alimentación:
- Deficiencias nutricionales
- Toxicidad sistémica
Sus hallazgos hacen que la necesidad de etiquetar sea aún más urgente y valida aún más la recomendación de comprar productos certificados como orgánicos.
La Terrible Verdad sobre el Roundup
En el 2009, un tribunal francés encontró a Monsanto culpable de mentir: publicitar falsamente su herbicida Roundup como “biodegradable”, “amigable con el medio ambiente” y afirmar que “deja el suelo limpio”.
En la actualidad cada vez más evidencia nos demuestra la falsedad de estas declaraciones. No creo que Monsanto sea una de las compañías más malvadas del planeta por nada. La compañía no ha hecho absolutamente nada para mejorar su influencia a nivel mundial en la salud humana y en el medio ambiente.
Jeffrey Smith, autor del bestseller llamado Seeds of Deception, dice que Monsanto, durante un momento de reflexión, debió haberse preguntado “¿Qué haría Darth Vader?” Porque a lo que han llegado es a una forma de pretender que son buenos y meterse en la industria agrícola y alimenticia y ahora resulta que lo que producen es realmente peligroso.
En efecto, de acuerdo con la Dra. Seneff, el glifosato posiblemente es “el factor más importante en el desarrollo de múltiples enfermedades crónicas y problemas de salud que se han vuelto muy comunes en las sociedades occidentalizadas,” incluyendo, pero no limitándose al:
Autismo
|
Enfermedades gastrointestinales como la enfermedad del intestino inflamado, diarrea crónica, colitis y enfermedad de Crohn
|
Obesidad
|
Alergias
|
Enfermedades cardiovasculares
|
Depresión
|
Cáncer
|
Infertilidad
|
Alzheimer
|
Parkinson
|
Esclerosis Múltiple
|
ALS y más
|
Cómo el Glifosato Empeora las Enfermedades Modernas
Aunque Monsanto insiste que el Roundup es tan seguro para los humanos como la aspirina, la investigación de Seneff y Samsel cuenta una historia completamente diferente. Su informe, publicado en la revista Entropy1, afirma que los residuos de glifosato que se encuentran en la mayoría de los alimentos consumidos en la alimentación occidental cortesía del azúcar, soya, maíz y trigo transgénico o genéticamente modificados, “aumentan los efectos dañinos de otros residuos químicos derivados de los alimentos y las toxinas en el medio ambiente, alterando las funciones normales del cuerpo e induciendo enfermedades.”
Curiosamente, su bacteria intestinal es un componente clave en el mecanismo de daño del glifosato.
Monsanto ha afirmado firmemente que el Roundup es inofensivo para los animales y humanos porque su mecanismo de acción que utiliza (que le permite matar la mala hierba), llamado vía shikimate, no está presente en los animales. Sin embargo, la vía shikimate SI se encuentra en las bacterias y esa es la clave para entender cómo causa un daño sistémico generalizado tanto en humanos como en animales.
Las bacterias en su cuerpo superan su número de células en un 10 a 1. Por cada célula en su cuerpo tiene 10 microbios de varios tipos y todos ellos tienen vía shikimate, por lo que todos responderán a la presencia de glifosato.
El glifosato causa una alteración extrema de las funciones y los ciclos de vida de los microbios. Lo que es peor, el glifosato afecta preferentemente las bacterias benéficas, permitiendo que los patógenos crezcan en exceso. En ese punto, su cuerpo también tiene que lidiar con las toxinas producidas por los patógenos. Una vez que comienza la inflamación crónica, estará entrando en el camino hacia una enfermedad crónica y potencialmente debilitante. En la entrevista anterior, la Dra. Seneff revisa una variedad de enfermedades crónicas, explicando cómo contribuye el glifosato con cada una. Así que si quiere aprender más, lo invito a escuchar la entrevista completa. Es bastante reveladora.
El Componente de Toxicidad Que Es Ignorado
La investigación revela que el glifosato inhibe las enzimas citocromo P450 (CYP), un largo y diverso grupo de enzimas que catalizan la oxidación de las sustancias orgánicas. Esto, según los autores, “es un componente ignorado de toxicidad para los mamíferos.”
Una de las funciones de las enzimas CYP es desintoxicar compuestos xenobióticos- compuestos químicos que se encuentran en un organismo vivo que normalmente no son producidos o consumidos por el organismo en cuestión. Limitando la capacidad de estas enzimas para desintoxicar los compuestos químicos extraños, el glifosato aumenta los efectos dañinos de las sustancias químicas y las toxinas ambientales a las que podría estar expuesto.
Pero eso no es todo. La Dra. Stephanie Seneff ha llevado a cabo una investigación en el MIT durante más de tres décadas. También tiene una licenciatura en biología en el MIT y una especialización en alimentación y nutrición y ya la había entrevistado anteriormente sobre sus ideas innovadoras en la importancia del azufre en la salud humana. No es de sorprender, que su última investigación también se refiera al azufre y cómo se ve afectado por el glifosato en los alimentos.
“Mostramos cómo la interferencia con las enzimas CYP actúa sinérgicamente con la alteración de la biosíntesis de los aminoácidos aromáticos por las bacterias intestinales, así como la alteración en el transporte del sulfato de suero,” escriben los autores.
“Las consecuencias son que la mayoría de las enfermedades y problemas de salud relacionados con la alimentación occidental, que incluye los trastornos gastrointestinales, la obesidad, la diabetes, las enfermedades cardíacas, la depresión, el autismo, la infertilidad, el cáncer y el Alzheimer. …El creciente y alarmante aumento de todos estos problemas de salud se remonta a una combinación entre la disbiosis intestinal, un transporte de sulfato deteriorado y la supresión de la actividad de varios miembros de la familia de las enzimas citocromo P450 (CYP).”
La Relación entre el Roundup y el Autismo
Durante los últimos 30 años, la Dra. Seneff ha sido una apasionada sobre las causas potenciales del autismo, después de vivir de cerca esto cuando el hijo de un amigo cercano fue diagnosticado con autismo. Ella señala las claras correlaciones entre el aumento del uso del glifosato en los últimos años (que ha dado como resultado la creación de malas hierbas más resistentes, que necesitan de mayores cantidades de herbicida) y el aumento en las tasas de autismo.
La tasa de autismo ha aumentado muy rápido, por lo que no cabe la menor duda de que es debido a causas ambientales. Nuestros genes simplemente no pueden mutar lo suficientemente rápido como para contribuir en el aumento que estamos viviendo.
Las últimas estadísticas fueron publicadas por la CDC el 20 de marzo y revelaban que 1 de cada 50 niños en los Estados Unidos padecían de autismo2,3, con una relación de 5:1 entre los niños y las niñas. Tan sólo el año pasado la CDC reportó una tasa de 1 de cada 88, que representó un aumento de un 23 por ciento desde el 2010 y un 78 por ciento desde el 2007. Sin embargo, puedo recordad que hace tan sólo 30 años, la incidencia de autismo en los Estados Unidos era de 1 de cada 100,000.
La Dra. Seneff identificó dos principales problemas en el autismo que no están relacionados con el cerebro pero si con la enfermedad- ambos estuvieron relacionados con la exposición al glifosato (a los diez minutos de la entrevista, ella da una explicación a detalle sobre cómo el glifosato causa tantos síntomas relacionados con el autismo):
- Disbiosis intestinal (alteraciones en la bacteria intestinal, inflamación, intestino permeable, alergias a los alimentos como intolerancia al gluten)
- Alteración en el metabolismo de azufre/ deficiencia de azufre y sulfato
Curiosamente, ciertos microbios en su cuerpo pueden descomponer el glifosato, que es algo bueno. Sin embargo, un bioproducto de esta acción es el amoniaco y los niños con autismo tienden a tener niveles altos de amoniaco en la sangre en comparación con la población general. Lo mismo ocurre en el Alzheimer. En su cerebro, el amoniaco causa encefalitis, es decir inflamación cerebral.
Otro agente devastador que realmente no querrá tener en su cuerpo es el formaldehído, un análisis nutricional recientemente descubrió que está presente en el maíz transgénico a un nivel 200 veces mayor a lo que se había determinado como tóxico para los animales. El formaldehído destruye el ADN y causa cáncer.
Otra investigación que respalda la relación entre el Roundup y el autismo es la que realizó la ex científica de la marina de los Estados Unidos, la Dra. Nancy Swanson. Tiene un doctorado en física y cinco patentes estadounidenses y también ha escrito más de 30 artículos científicos y dos libros sobre las mujeres en la ciencia. Hace diez años, se enfermó gravemente y en su viaje para recuperar su salud optó por los alimentos orgánicos. No es de sorprender (para los que saben) que sus síntomas mejoraron dramáticamente. Esto la llevó a comenzar a investigar sobre los alimentos transgénicos.
Ha recopilado meticulosamente las estadísticas sobre el uso del glifosato y varias enfermedades y problemas de salud, incluyendo el autismo. Es muy difícil imaginar una combinación más perfecta entre el aumento del uso del glifosato y la incidencia del autismo…Para acceder a sus artículos e informes, por favor visite Sustainable Pulse4, un sitio web europeo que habla sobre los peligros de los alimentos transgénicos o genéticamente modificados.
Cuando los Alimentos Se Convierten en Veneno…
Lo que la industria biotecnológica, encabezada por Monsanto, ha logrado hacer es convertir los alimentos en veneno…literalmente y en más de una forma. Aquí, estamos hablando únicamente de los efectos del Roundup. Existen muchos indicios de que la alteración genética de los cultivos en sí plantea importantes problemas de salud. Y dado a que la mayoría de los cultivos son transgénicos, tiene que lidiar con al menos dos factores potencialmente peligrosos y la toxicidad del glifosato es sólo una parte de la ecuación.
Como lo discutimos anteriormente, el glifosato tiene un gran número de efectos biológicos devastadores. Tan es así que podría ser considerado uno de los factores más importantes en el desarrollo de una amplia variedad de enfermedades y problemas de salud modernos, incluyendo el autismo. En resumen, sus efectos dañinos incluyen:
Deficiencias nutricionales, ya que el glifosato inmoviliza ciertos nutrientes y altera la composición nutricional de los cultivos tratados
|
Alteración de la biosíntesis de los aminoácidos aromáticos (estos son aminoácidos esenciales que no son producidos en el cuerpo sino que se obtienen de los alimentos)
|
Aumento de la exposición a las toxinas (esto incluye altos niveles de glifosato y formaldehído en los alimentos)
|
Alteración del transporte de sulfato y el metabolismo y deficiencia de azufre
|
Toxicidad sistémica- un efecto secundario de la alteración extrema de la función microbiana en su cuerpo, especialmente de los microbios benéficos, permitiendo la proliferación de patógenos
|
Disbiosis intestinal (alteraciones en la bacteria intestinal, inflamación, intestino permeable, alergias a los alimentos como la intolerancia al gluten)
|
Aumento de efectos dañinos de otros residuos químicos de los alimentos y toxinas ambientales como resultado de la desactivación de las enzimas desintoxicadoras
|
Creación de amoniaco (un bioproducto credo cuando ciertos microbios descomponen el glifosato) que puede causar inflamación cerebral relacionada con el autismo y el Alzheimer
|
Cómo Protegerse Usted y a su Familia de Este Veneno Sistémico
Es importante entender que el glifosato rociado en los cultivos convencionales y los cultivos transgénicos en realidad se vuelve sistémico en toda la planta, por lo que no puede eliminarse. Está dentro de la planta. Por ejemplo, se ha encontrado que el maíz transgénico contiene 13 ppm de glifosato, en comparación con el maíz no-transgénico que no contiene nada. Los 13 ppm contenidos en el maíz transgénicoes 18 veces más alto al nivel “seguro” de glifosato establecido por la EPA.
Se han producido daños en los órganos de los animales a niveles tan bajos como los 0.1 ppm. Si eso no es razón suficiente para que este ingrediente sea etiquetado y así poder evitar cualquier producto que lo contenga, como el aceite de maíz o el jarabe de maíz de alta fructosa, entonces no sé qué lo sea.
También sería algo inteligente dejar de utilizar Roundup en su hogar, en donde los niños y las mascotas pueden entrar en contacto con él con el simple hecho de caminar por esa zona.
Hasta que se requiera el uso de etiquetas para los alimentos transgénicos en los Estados Unidos, la única manera de evitar los ingredientes transgénicos es consumiendo alimentos frescos y orgánicos y comprar únicamente productos que estén certificado como 100% orgánico por la USDA. Las carnes deben de provenir de animales alimentados con pastura para asegurarse de que no fueron alimentados con maíz o soya GM.
Por último pero no menos importante, no debe confundir las etiquetas que dicen “natural” con las certificadas como orgánicas.
La etiqueta que dice “natural” no está basada en ningún estándar y muchas veces los vendedores abusan de esta palabra para hacerle propaganda a sus productos transgénicos. Por otra parte, los productores y fabricantes de productos orgánicos que cuentan con el sello de la USDA, tienen que cumplir con los estándares más estrictos disponibles en la actualidad. Con el fin de calificar como orgánico, un producto debe de ser cultivado y procesado utilizando métodos orgánicos que reciclen los recursos y promuevan la biodiversidad. Todo deber de ser cultivado sin el uso de pesticidas sintéticos, genes de la bioingeniería, fertilizantes a base de petróleo o fertilizantes a base de lodos de aguas residuales.
Continúe Luchando por el Etiquetado de los Alimentos Transgénicos
Con el rechazo de la Propuesta 37 en California, el campo de juego actualmente se ha movido al estado de Washington, en donde la iniciativa 522, “Las Personas Tienen el Derecho a Saber Sobre los Alimentos Transgénicos” obligará a que los alimentos vendidos sean etiquetados en el caso de contener ingredientes transgénicos.
Recuerde, al igual que la Propuesta 37 en California, estas iniciativas necesitan el apoyo de las personas para que tengan éxito. La Propuesta 37 fue rechaza con un pequeño margen, simplemente porque no tuvimos los fondos para contrarrestar las campañas masivas creadas por el “No a la Prop. 37” liderada por Monsanto y otras compañías de alimentos. No permitamos que Monsanto y sus aliados nos confundan y engañen a las personas de Washington y Vermont como lo hicieron en California. Así que por favor, lo invito a involucrarse y ayudar de la manera que pueda.
- No importan en qué estado viva, por favor done dinero para apoyar estos esfuerzos de etiquetado a través de Organic Consumers Fund.
- Inscríbase para conocer más sobre cómo involucrarse visitando Yeson522.com
- Para conocer las últimas noticias relacionadas con las iniciativas para el etiquetado de alimentos, por favor únase a la Asociación de Consumidores Orgánicos en Facebook o sígalos por Twitter
- Hable con los productores y tiendas orgánicas para pedir su apoyo para las iniciativas de Washington y Vermont