Productores de Lácteos Combaten la Radiación con Boro


radiacion de los alimentos

Una carta pública de los productores de lácteos orgánicos en Hawái explica cómo reducir la radiación en la leche y en los vegetales. La carta explica que el boro puede ser utilizado para capturar la radioactividad.

La carta afirma que el boro es el único mineral capaz de aceptar e ionizar la radiación que no cambia el núcleo de las células vivas. Los productores en Hawái han comenzado a alimentar a sus vacas y cabras con borato de sodio durante los tiempos de ordeño, de igual forma se lo agregan a los bebederos y al quelpo.

Según Food Freedom la carta dice, en parte:

"Afortunadamente el vino tinto y el café son fuentes importantes de boro, así como las frutas no cítricas, uvas rojas, ciruelas, manzanas, peras, aguacates, legumbres y nueces. El boro también es conocido por no ser cancerígeno, ni mutagénico y ha sido utilizado para proteger a los astronautas en el espacio cuando estos salen del campo magnético protector de la tierra.

…En estos tiempos difíciles, esto es todo lo que podemos hacer para poder estar verdaderamente informados sobre la situación actual y así actuar como se debe. Estamos haciendo todo lo posible para proteger nuestras tierras, nuestros animales y nuestros cuerpos de la radioactividad y esperamos que usted haga lo mismo."

Comentarios del Dr. Mercola

La leche de vacas que se alimentan de pasto, a menudo es uno de los primeros alimentos en presentar contaminación por radiación, incluso cuando la radiación no es detectada en el pasto contaminado, la leche de los animales que pastan en él muestran niveles alarmantemente altos. El New York Times informa que el pasto contaminado con yodo radioactivo volverá a concentrarse en la leche por un factor de 1,000.

¿Hay Niveles Dañinos de Radiación en la Leche?

Hay algunos informes en internet rumorando que los niveles de radiación en la leche hawaiana que han sido detectados son de 600-2,000 por ciento por encima de los límites de la EPA (U.S. Environmental Protection Agency), pero no me ha sido posible confirmar esta información.

Hasta el momento, parece que en la última ronda de muestras de leche tomada por la EPA, la cual se llevo a cabo en Abril del 2011, arrojó que la leche del estado de Washington presenta niveles bajos de radiactividad – 5,000 veces por debajo del nivel de intervención de la FDA. También se encontraron niveles bajos de radioactividad en las muestras de leche de California tomadas de una lechería orgánica por la universidad de California, Berkeley también encontró niveles muy bajos de radiación, y un resumen de los resultados señaló que:

“…habría que consumir al menos 1,900 litros de leche para recibir la misma dosis de radicación que en un viaje en avión a través del país.”

Aquí es donde las cosas se ponen difíciles.

Según un artículo publicado en EurActiv.com, CRIIRAD, un organismo de investigación francés especializado en radioactividad, publicó este documento indicando que los riesgos relacionados con la contaminación del yodo-131 en Europa ya no son “insignificantes”. Según los informes, han advertido a niños y mujeres embarazadas o en lactancia, evitar el consumo de vegetales con hojas largas, queso cremoso así como beber leche fresca, debido al riesgo de contaminación por radiación.

Y se dio a conocer que:

Información de la costa oeste de los Estado Unidos, que recibió la lluvia radioactiva de Fukushima de 6-10 días antes que Francia, revela que la concentración de los niveles radioactivos de yodo-131 son de 8-10 veces mayor allá, afirma el instituto.”

Mientras tanto una carta enviada por los productores de lácteos orgánicos en Hawái, publicada en HawaiiHealthGuide.com, afirma que la leche de dos grandes centrales lácteas ha mostrado “elevados niveles de radiación, de 400 a 2,400 veces más a los aceptados como niveles seguros.” Como resultado, los productores están tomando el asunto en sus propias manos y están utilizando el boro, que es un mineral natural, para reducir los riesgos relacionados.

¿Cómo Combate el Boro la Radiación?

El boro (borato de sodio) es el mineral que se encuentra en el popular limpiador natural de usos múltiples, Bórax (el bórax contiene un 11 porciento de boro). Algunas industrias lácteas orgánicas en Hawái estás agregando este mineral a la comida y al agua con la que alimentan a las vacas y cabras, de igual forma lo aplican directamente a sus pastizales y a los pastizales vecinos ya que actúa como absorbente de radiación y no es tóxico.

Según los productores:

“El boro es el único mineral capaz de aceptar la radiación iónica que nunca cambia el interior o el núcleo de la célula. Es decir, el boro toma la radiación y la libera si alterar su delicado balance.

El boro se utiliza ampliamente en la industria nuclear. El borato de sodio normalmente es utilizado para controlar el líquido de los sistemas de control en caso de emergencias. Fue utilizado en combinación con arena en Cheronbyl en 1986 para prevenir otras fugas de radiación. También fue utilizado en Tokaimura Japón en 1999 con el fin de absorber grandes cantidades de radiación después de un incidente en la planta. Actualmente está siendo vertido en las barras de combustible y en las aguas que rodean la planta de Fukushima.

Generalmente el boro es reconocido como extremadamente seguro y puede ser utilizado para capturar la radioactividad en nuestros suelos, jardines, huertos, etc. También puede ser ingerido de forma segura por animales y humanos. El boro acepta la radiación y la ioniza dentro de nuestro cuerpo, después nuestro cuerpo desecha el boro y la radioactividad de forma segura.”

Una vez que los componentes radioactivos han contaminado las tierras de cultivo y los cultivos, no hay mucho que se pueda hacer al respecto, pero el uso del boro puede ser una forma sencilla de ayudar a limpiar algo de este desastre radioactivo.

Aunque no creo que los riesgos hayan demostrado ser importantes en este momento, excepto por los vecinos de la planta japonesa dañada en Fukushima, el boro también puede ser utilizado en forma de suplemento; usted puede leer más sobre el uso de suplementos aquí. El boro también se encuentra en diferentes niveles en algunos alimentos como el café, aguacate, nueces, uvas rojas, manzanas y peras.

Optimizar sus Niveles de Esta Vitamina Puede También Ayudar a Protegerse de la Radiación

Si usted está buscando estrategias que ayuden a prevenir el daño causado por la lluvia radioactiva del reciente desastre nuclear en Japón, investigadores informaron en el International Journal of Low Radiation que la forma molecular más activa de la vitamina D --D3 (también conocida como calcitrol)—podría ofrecer protección contra una gran variedad de daños producidos por la radiación, incluyendo aquellos causados por la radiación ambiental o incidentes nucleares de bajo nivel, mediante de los siguientes mecanismos:

  • Regulación y proliferación del ciclo celular
  • Diferenciación y comunicación celular
  • Muerte Celular Programada (PCD por sus siglas en inglés)
  • Anti-angiogenesis (un proceso que detiene la creación de nuevos vasos sanguíneos en los tumores, es decir detiene el crecimiento)

Los mecanismos de protección son tan fuertes que los investigadores sugirieron que la vitamina D3 debe ser considerada uno de los principales (si no el principal) agentes no farmacéuticos para protegerse contra los daños de radiación sub-letal baja y en particular de la producida por el cáncer.

Los investigadores han descubierto que para que los adultos tengan los niveles sanguíneos dentro del rango terapéutico la ingesta diaria de la vitamina D con un rango de 4,000-8,000 IU es necesario, para así mantener los niveles metabólicos de la vitamina D en la proporción necesaria para reducir a casi la mitad el riesgo de cáncer de mama y de colon.

¿Debería Estar Preocupado por la Radiación de Japón?

Hablar sobre la lluvia radioactiva puede ser aterrador, sobre todo si amenaza nuestros suministros de alimentos. Pero quiero enfatizar que en este momento parece ser que la radiación de la planta nuclear de Fukushima NO es una amenaza seria para su salud a menos que estuviera cerca del reactor.

Ayuda a poner en perspectiva el recordar que casi todo en la vida tiene un riesgo. Por ejemplo, manejar. Nadie puede negar que cada vez que se sube a su coche podría morir por causa de un conductor en estado de ebriedad o por alguien que maneja y envía textos en su teléfono celular. Sin embargo, todos estamos dispuestos a correr ese riesgo porque creemos en que las ventajas de viajar en carro superan los riesgos de sufrir un accidente.

Del mismo modo, según John Boice JR un experto en radiación de la Unidad Internacional de Epidemiologia en Rockville, MD, en cualquier momento usted está expuesto a una serie de agentes cancerígenos que son más potentes que la radiación (salvo la exposición directa a un reactor nuclear o una explosión atómica).

La cantidad promedio de radiación a la que estuvieron expuestas las victimas en Hiroshima y Nagasaki aumenta el riesgo de muerte por cáncer de pulmón en un 40 porciento. Fumar una cajetilla de cigarros al día aumenta el riesgo de morir a causa de cáncer de pulmón en un 400 por ciento,” dice Boice.

Estas estadísticas no son muy alentadoras para mucha gente, sobre todo para las personas en Japón o en la costa oeste de los Estados Unidos.

¿Hay Algo Más que Usted Pueda Hacer?

Como escribí a principios de este mes, no existe una “píldora mágica” que lo proteja de cualquier riesgo potencial de radiación… pero si existen algunas estrategias naturales—como el uso de boro en la agricultura y la optimización de sus niveles de vitamina D—eso puede ayudar. Otras opciones prácticas incluyen:

Yoduro de potasio

Si usted está expuesto al yodo radioactivo, su tiroides, que es la que se encarga de tomar el yodo de la sangre para producir hormonas tiroideas absorberá automáticamente esta sustancia. Es por eso que después de una exposición a este tipo de radiación puede causar cáncer de tiroides.

El yoduro de potasio (una forma estable de yodo) se encarga de “abastecer” su sistema con yodo por lo que su tiroides no tiene la necesidad de tomarlo en la forma radioactiva. La Asociación Americana de Tiroides recomienda que cualquier persona que viva a unas 50 millas de una planta nuclear tenga siempre yoduro de potasio en su casa en caso de emergencia y se aconseja que este suplemento también deba estar a disposición de las personas que vivan a unas 200 millas de la planta.

Sin embargo, sólo se debe tomar yoduro de potasio si usted está cerca de una precipitación radioactiva activa. Esta NO es una estrategia que deba ser utilizada como prevención a largo plazo ya que solo protege su tiroides de uno a tres días, pero no más, y tomarla cuando no es una emergencia puede provocar tirotoxicosis.

En este sentido, la vitamina D puede ser mejor ya que puede ser tomada antes, durante y después del incidente de radiación y los resultados siempre son positivos, asumiendo que usted monitorea sus niveles de sangre para mantenerlos en un rango óptimo.

Si pasa una nube radioactiva su cuerpo tenderá a absorber ese yodo radioactivo en su glándula tiroidea para llenar los depósitos de yodo, pero recuerde, esto solo es en caso de que usted tenga deficiencia de yodo. En una situación ideal usted estará tomando la cantidad adecuada de yodo de fuentes seguras, las cuales lo protegerán de forma natural del yodo radioactivo. Sin embargo, en la realidad es probable que muchos tengan deficiencia de yodo.

Hace poco le hice una entrevista al Dr. David Brownstein, quien se ha encargado de recopilar una gran cantidad de información clínica sobre este tema y puede ser considerado un experto en el área. El Dr. Brownstein ha trabajado con yodo durante los últimos 20 años, ha tratado a más de 50,000 pacientes en su clínica y descubrió que más del 95% de ellos tienen deficiencia de yodo. Este es un resultado increíble ya que coloca a la deficiencia de yodo a la par con el porcentaje de gente que tiene deficiencia de vitamina D.

Espirulina

La espirulina-- una alga verde-azul—podría ser otra alternativa útil para protegerse contra los efectos de la radiación, de hecho existe una investigación que lo respalda. La espirulina era utilizada para tratar niños expuestos a niveles crónicos bajos de radiación después del desastre nuclear en Chernobyl.

Según una revisión científica sobre los beneficios de la espirulina:

“Hasta hace poco el interés en el espirulina era principalmente por su valor nutricional. Sin embargo, en la actualidad mucha gente está buscando los posibles efectos terapéuticos de la espirulina.

Muchos estudios pre-clínicos y otros pocos estudios clínicos sugieren varios efectos terapéuticos que van desde la reducción de cáncer y colesterol hasta mejorar el sistema inmunológico, el aumento de los lactobacilos intestinales, lo que reduce la nefrotoxicidad por metales pesados y medicamentos, y protección a la radiación.”

¿Pero cómo es que esta alga verde-azul tiene esta capacidad de protección contra la radiación?

La espirulina contiene un 16 porciento de ficocianina—un pigmento azul que está unido a sus membranas fotosintéticas. La ficocianina también es una molécula de almacenamiento de nitrógeno. Los átomos de nitrógeno pueden formar un complejo con metales pesados como el cesio radioactivo y el estroncio, por lo tanto “limpia” estos metales radioactivos de su cuerpo.

Cúrcuma

La cúrcuma contiene un amplio espectro de agua, grasa y componentes solubles en alcohol, todos estos contribuyen a la reducción de daño relacionado con la radiación externa y las exposiciones de radioisótopos internas. Esto se logra principalmente a través de la reducción del estrés oxidativo a las estructuras celulares, particularmente de ADN.

Una investigación encontrada en la base de datos de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos demuestra que la cúrcuma tiene importantes propiedades radioproductivas, con 23 estudios clasificados en GreenMedInfo.com hasta el momento.

Es de vital importancia que al elegir un producto de la cúrcuma este tenga certificación orgánica para asegurar que no ha sufrido una radiación gamma (¿irónico?) con radiactivos de cobalto- 60, proceso aprobado por la USDA y conocido como la “pasteurización fría”. Condimentos convencionales son comúnmente expuestos a radiaciones gamma tan altas como 30 kilograys, o un valor de radiación equivalente a 990 millones de radiografías de tórax.

La irradiación de hierbas produce acido fórmico, formaldehido y subproductos radioliticos únicos con propiedades cancerígenas.

Suero de Leche Dulce

Entrevisté a Ori Hofmekler para conocer un punto de vista alternativo en cómo se puede disminuir el riesgo de la radiación. Ori da algunos argumentos interesantes sobre el uso de un concentrado de proteína de suero de leche de alta calidad para ayudar a protegerse contra la absorción de minerales radioactivos.

Una de las razones para usar el suero de leche en una situación como esta es porque la proteína de suero de leche contiene los elementos que ayudan a su cuerpo a producir glutatión, que es una de las mejores formas de desintoxicar estas toxinas.

Otra razón es que es una alta fuente de minerales y trazas de minerales que existen en la naturaleza. Tiene todo tipo de minerales y oligoelementos posibles —incluyendo sodio orgánico—que su cuerpo necesita en la forma más bioactiva.

Otras Hierbas y Suplementos

Los siguientes alimentos, hierbas y suplementos puedan ayudar a su salud en general en caso de un accidente nuclear.

Ginseng

Quelpo y otras algas marinas (alto contenido en yodo natural)

Zeolitas (neutraliza la radiación) o arcilla bentonita

Ashwagandha (hierba adaptogénica)

Acido fúlvico

Hongos Reishi (apoyo inmunológico)

Altas dosis de vitamina C

Magnesio

Selenio

Aceite de coco (que ayuda a la tiroides)

Astaxantina (protege de la radiación iónica)

Chlorella (contiene clorofila lo que aumentará su Resistencia a la radiación)

GreenMedinfo.com contiene un extenso archivo sobre la investigación de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos sobre las sustancias naturales con propiedades radioprotectivas que usted puede consultar para más información.

+ Fuentes y Referencias